La delegación municipal de Vías y Obras va a llevar a cabo más de una veintena de actuaciones para eliminar las barreras arquitectónicas que existen en la ciudad. Para ello, se ha realizado una inversión de unos 70.000 euros, con los que se va a intervenir en multitud de calles y barrios, para incrementar la accesibilidad y la integración en el entramado urbano, restaurando y adaptando a la legibilidad vigente aquellas zonas que se encuentran en peor estado.
Entre las tareas que se van a llevar a cabo se encuentra la ampliación del acerado de la calle Frailes, además en esta localización se ha instalado una barandilla a la salida del Colegio San Agustín, para garantizar la seguridad de los escolares que vayan a este centro.
En la calle Federico García Lorca se ha dispuesto un vado de seguridad para el paso de peatones; en la plaza de La Habana se ha construido una rampa de acceso a una vivienda, para el uso de personas con discapacidad; y en la carretera del Molino Viejo se ha instalado un báculo para señalar la existencia de un paso peatonal al mismo nivel.
Otros de los puntos, donde actualmente se están realizando estos trabajos de eliminación de barreras arquitectónicas, es en la avenida de la Diputación, junto a la glorieta Nelson Mandela, en la que se está saneando el acerado que se ha levantado a causa del crecimiento excesivo de las raíces de los árboles que están plantados en esta vía.
En la calle La Barca se han renovado varias plaquetas muy deterioradas, se han colocado nuevas arquetas de registro y se está revisando el contorno del paso peatonal; además, los técnicos municipales están elaborando un registro de todas las zonas peatonales de la ciudad, para así seguir un seguimiento y valorar su estado de conservación.