Un azulejo que se ha descubierto hoy martes en la Plaza de Las Bodegas explica el origen de la nomenclatura de la misma y destaca la importancia del sector vitivinícola en la localidad a lo largo de la historia. Este elemento decorativo y reivindicativo de una actividad tradicional tan arraigada en el municipio se sitúa además muy cerca del lugar en el que está previsto habilitar el futuro Museo del Vino y la Sal.

Azulejo plaza de las Bodegas Chiclana
El texto que se recoge en el mismo es el siguiente:
Inaugurada en 2007, rinde homenaje con su nombre a la secular y afamada tradición vitivinícola de Chiclana, que se remonta al siglo XV y a la que debe, entre otras razones, su condición de ciudad, distinción concedida en 1876 por el rey Alfonso XII. Chiclana llegó a contar con más de un centenar de bodegas, -dos de ellas en este lugar- de las que actualmente conserva una decena. Este rico y prestigioso legado llega hasta nuestros días, con excelentes caldos reconocidos mundialmente, tanto que el poeta portuense Rafael Alberti definió el vino de Chiclana como “el mejor del mundo”.
Este azulejo es el primero de una serie que se elaborará en los próximos meses para dar a conocer el origen de los nombres de algunas calles del casco urbano. Además, se incluye dentro del capítulo de mejoras del mobiliario urbano de las principales calles del centro, y entre los que se encuentran señales peatonales, indicaciones para las avenidas, monumentos y placas referentes al Bicentenario, etcétera.