Chiclana es famosa por sus playas, su buena gastronomía y su gente. Pero también es un sitio que merece la pena visitar en otras épocas del año que no son el verano. Por ello, con el fin de fomentar el turismo de invierno, el ayuntamiento ha presentado un nuevo proyecto de turismo de naturaleza basado en la ornitología y el medio ambiente.

En el mes de septiembre es cuando comienzan las grande migraciones de aves y en invierno es cuando mejor se puede disfrutar del campo. Impulsando este tipo de turismo se puede romper la estacionalidad, crear puesto de trabajo e impulsar la economía de Chiclana en una época del año en la que aún cuesta mantener el ritmo de la temporada alta.

El objetivo de este proyecto es primordialmente combatir la estacionalidad del turismo y hacer que Chiclana se convierta en un destino turístico durante todo el año. Para esto se va a realizar un análisis de la potencialidad del patrimonio natural de Chiclana, que consta de aves, pero también de lagunas y pinares, entre otras cosas. Además, hay que valorar y ver la forma de actuar para materializar esta masa medioambiental y ponerla en el mercado para atraer el turismo.

El segundo paso del proyecto es trabajar con el tejido empresarial de Chiclana y con los emprendedores para establecer conjuntamente un abanico de alternativas a esas actividades que son complementarias al turismo de verano, al de sol y playas.

Por último, la tercera parte del proyecto es generar el producto, pero no inventándolo, sino teniendo en cuenta lo que el empresario de Chiclana quiere vender y lo que el turista demanda. En ese punto en común es donde se genera el producto, por tanto, es un desarrollo participativo, para poder activar y mover la economía, así como generar empleo.

La fecha de presentación de este proyecto será en enero del próximo año en FITUR, la Feria Internacional del Turismo, y en la Feria Internacional de las Aves.