El sábado pasado la Jefatura de la Policía Local de Chiclana recibió el aviso de un posible delito de violencia de género. De manera inmediata, los efectivos del Grupo Minieva, se personaron en el domicilio donde encontraron a una mujer que se encontraba en un estado avanzado de ansiedad. La víctima declaró ante los agentes que había sido agredida por su propio hermano, quien le había propinado varios golpes, insultos y amenazas.
Tal y como explicó la víctima, el presunto maltratador vivía en el domicilio familiar desde que se separó de su esposa, a la que supuestamente también agredía, y desde entonces la convivencia se había vuelto insostenible debido al carácter violento del sospechoso.
El agresor, fue detenido en el propio domicilio familiar por un presunto delito de violencia en el ámbito familiar tras reconocer ante los agentes del Grupo Minerva haber agredido a su hermana y encontrarse bajo los efectos del alcohol. Por otra parte, la víctima fue conducida hacia uno de los centros sanitarios de la ciudad para ser atendida por las lesiones que presentaba cuando fue identificada por la Policía.
El Grupo Minerva se hizo cargo a partir de ese momento de toda la atención y las prestaciones necesarias de la víctima. Desde la tramitación de las eventuales denuncias hasta la evaluación de los niveles de riesgo, pasando por la colaboración con los agentes sanitarios y sociales y la puesta en marcha de las investigaciones pertinentes.
Por su parte, el delegado municipal del área de Policía Local, Agustín Díaz, declaraba en relación a lo sucedido que “la única posibilidad del grupo Minerva es, desgraciadamente, concienciar a la ciudadanía para trabajar desde la prevención. No obstante, en la actualidad, este grupo, especializado en violencia de género, «se encuentra haciendo una reflexión para estudiar las alternativas posibles para adelantarse en este tipo de casos”.