Chiclana de la Frontera está hermanada con Chiclana de Segura, Úbeda y El Astillero en España. También con la francesa Béziers y la portuguesa Alcácer do Sal. Sin embargo, existe una ciudad al otro lado del océano que está hermanada, históricamente, con nuestra villa. Hablamos de Portoviejo, la primera ciudad que se fundó en la costa de Ecuador, en el Nuevo Mundo. ¿Y cuál es la relación que mantiene con Chiclana? Pues no es otra que su fundador, el capitán Francisco Pacheco Jiménez (14881541). La Villa Nueva de San Gregorio de Portoviejo estuvo gobernada por Pacheco, que ostentó los cargos de Teniente de Gobernador y Capitán General. El conquistador chiclanero, que integró las expediciones por Perú capitaneadas por Francisco Pizarro y Diego de Almagro, intervino además en otros episodios históricos como la fundación de San Francisco de Quito, la capital de la república ecuatoriana. Igualmente, participó en la captura y muerte de Atahualpa, el último gobernante del Imperio inca (acaecida en 1533).
Pacheco era un militar prometedor cuando alcanzó la Mitad del Mundo, concretamente la desembocadura del río Portoviejo entonces territorio de Picoazá; actualmente, capital de Manabí y ciudad más poblada de esta provincia, donde fundó aquella ciudad un 12 de marzo de 1535. Lo hizo en el bergantín San Pedro, acompañado de una treintena de hombres y de algunos indígenas que habían sido apresados por Pedro de Alvarado; éstos fueron liberados en señal de amistad. Así se granjeó el chiclanero la simpatía de los habitantes. Durante cinco meses, los nuevos colonos comenzaron a construir los primeros recintos castellanos.
Nuestro hombre, sin embargo, hubo de enfrentarse a las vicisitudes de una época con intensas luchas de poder. Se las tuvo que ver con Pedro Puelles otro conquistador, delegado de Benalcázar, que pertenecía a la empresa pizarrista. Llegado a la misma zona, se creyó el fundador de Portoviejo. Pizarro, desde Perú, dio la razón a Pacheco, ratificando sus cargos (el de Chiclana se había adelantado a Puelles en varios meses). Finalmente estuvo allí apenas dos años, dada su condición de conquistador almagrista. Había disputas entre partidarios de Almagro y de Pizarro: el ansia por controlar los nuevos territorios y la posibilidad de hallar minas de esmeraldas azuzaban las ambiciones de ambos bandos.
Aunque si por algo se caracterizó el siglo XVI ecuatoriano fue, en palabras del diplomático y periodista Leopoldo Benites Vinueza, por ser “el siglo del oro […] Lo buscaron en los templos indianos, en los sepulcros aborígenes, en los escondites posibles. Mataron, incendiaron, atormentaron por conseguirlo”, escribió este ecuatoriano en “Ecuador, drama y paradoja” (1986).
Conquistador Pacheco
Lo cierto es que la relación de Chiclana con el Descubrimiento de América y el proceso conquistador y colonizador tiene en el capitán Pacheco Jiménez una de sus figuras puntales. Nacido en Chiclana e hijo de Francisco Pacheco Aragón y Manuela Jiménez, era descendiente de una familia de gran linaje español. Su vida transcurrió prácticamente casi toda en las llamadas Indias Occidentales, puesto que embarcó siendo apenas un adolescente. Vivió en Nicaragua, donde contrajo matrimonio con María Ferrol, hija del piloto Juan Ferrol. Fue allí donde murió, en 1541.