Recientemente ha tenido lugar la clausura del taller laboral que Cáritas ha venido impartiendo en el Centro Social Padre Almandoz de Chiclana de la Frontera. El curso estuvo dirigido a la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social y se ha desarrollado desde octubre de 2011 hasta el pasado mes de mayo de 2012.
Los doce alumnos del taller, doce mujeres y un hombre, tenían edades comprendidas entre los 20 y los 45 años y fueron derivados al curso a través de la red de Puntos de Integración Sociolaboral de Cáritas. La programación del curso ha estado dirigida a instruir a los participantes en materias básicas para acceder al mercado laboral, como son la informática, la salud y la higiene en el trabajo, la cultura general y las habilidades sociales y laborales.
Las clases han sido coordinadas por un técnico procedente del programa de empleo de Cáritas y han estado impartidas por voluntarios especializados. Además, las clases teóricas se vieron complementadas con una serie de prácticas en empresas, gracias a las cuales los estudiantes han podido tomar conciencia de las habilidades necesarias y las responsabilidades que conlleva un puesto de trabajo.
José María Bravo, arcipreste de Chiclana, fue el encargado de presidir el acto de clausura del taller, en un evento que contó con la presencia de los responsables de Cáritas en las diferentes parroquias de la ciudad y los voluntarios que han prestado su inestimable colaboración a este programa. Del mismo modo, asistieron al evento la coordinadora del programa diocesano de empleo, Olga García, Ianire Barturén, docente del módulo teórico, Nina Brenes, responsable de las prácticas laborales, Leticia Vierna, coordinadora del programa Empresas con Corazón y Carmen Izquierdo, gerente de la empresa colaboradora en las prácticas formativas El Pico de Oro.
En su discurso de clausura, José María Bravo quiso felicitar a los alumnos por haber completado satisfactoriamente la programación del taller, al mismo tiempo que agradecía de manera pública la colaboración de las empresas en las que los estudiantes han podido realizar sus prácticas laborales: Cadena Hipotels, Supermercados Dinosol, El Pico de Oro, Juguetón, Modas Pedro Muñoz, La Casa del Peluquero, Intersport Hobby y Horno la Gloria.
Por su parte, Ianire Barturén puso en valor la extraordinaria actitud mantenida por los alumnos a lo largo de la realización del curso, lo cual derivó en un ambiente de trabajo muy positivo y fructífero.
Finalmente, una de las mujeres que habían formado parte del taller salió a la palestra para agradecer en nombre de todos sus compañeros el trabajo de los voluntarios y la valiosa formación que han obtenido gracias a la organización de este taller por parte de Cáritas.
Hay que destacar que, de los doce alumnos que han tomado parte de este curso de inserción laboral, uno de ellos ya ha logrado acceder a un empleo y otros dos han decidido continuar la formación académica que habían abandonado hace años. El resto, continúa con su proceso de formación en la Red de Putos de Integración Sociolaboral de Cáritas de cara a la esperada incorporación a un puesto de trabajo.