Un Punto de Encuentro Familiar es un espacio neutral que facilita la reunión de los miembros de la familia en crisis para garantizar así el derecho de los hijos a mantener una relación adecuada con sus padres biológicos y otros parientes o allegados, tras una separación, divorcio o ruptura familiar, estableciendo los vínculos necesarios para su buen desarrollo psíquico, afectivo y emocional, y preparando a los padres para que, en un futuro, puedan mantener la relación con sus hijos con plena autonomía y sin dependencia de este servicio.
Esto es lo que se solicitó desde la Delegación de la Mujer del Ayuntamiento de Chiclana el pasado mes de mayo a la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, a la Dirección General de Violencia de Género y Asistencia a las Víctimas y a la Delegación Provincial para la Igualdad.
Para la creación de este Punto de Encuentro Familiar, el Ayuntamiento ofrece en la solicitud presentada “las instalaciones o dependencias necesarias, colaborando ambas instituciones en la creación y puesta en marcha de un Punto de Encuentro Familiar para la entrega y recogida de menores en el desarrollo de un régimen de visitas en los casos de violencia de género, ampliable a otros casos en que se precise”.
Ana María Bertón, delegada de la Delegación de la Mujer, comentó que desde el 31 de mayo, fecha de la presentación de la solicitud, «estamos a la espera de que se nos comunique la autorización pertinente para la puesta en marcha de un servicio que, sin ninguna duda, resultaría beneficioso para muchas familias chiclaneras”.
El Punto de Encuentro Familiar se establece como un medio de apoyo a los juzgados, limitándose sus competencias en materia legal al cumplimiento de lo expuesto en la resolución judicial y, por lo tanto, es el juez competente quien debe acordar la utilización del servicio en cada caso concreto.