El Ayuntamiento de Chiclana se ha sumado en la ayuda a Nepal, después del acuerdo tomado en la Comisión Local de Ayuda de Emergencia, por el que la Delegación Municipal de Cooperación Internacional destinará la cantidad de 10.000 euros a dos ONGs que están realizando su labor en la cordillera del Himalaya, asolada por los terremotos de las últimas semanas.
El Consistorio ha destinado una ayuda de 5.000 euros a la organización Proyde, y otros 5.000 euros a la Fundación para la Cooperación Internacional Manuel Madraza (FMM), para el envío de unidades sanitarias y kits de supervivencia.
El alcalde de la ciudad ha expuesto que en cuanto tuvieron conocimiento de la situación en la que se encontraban las personas afectadas en Nepal, decidieron colaborar ante esta catástrofe humanitaria. Chiclana es una ciudad solidaria y no ha podido mirar hacia otro lado en este caso, por lo que ha mostrado su solidaridad con esta partida económica que ayudará a las familias afectadas a través de organizaciones que trabajan sobre el terreno y que recibirán materiales para poder atender a esas personas.
La delegada municipal de Cooperación Internacional ha resaltado que el proyecto que desarrolla la FMM tiene un equipo de intervención inmediata, con 52 perfiles profesionales adecuados y con bastante experiencia en situación de catástrofes, y para ellos irá parte de la ayuda económica. La otra mitad se va a destinar a la organización “Bangalore Cares For Nepal” a través de la cual, Proyde hace posible la llegada de toda la ayuda a las personas afectadas por el terremoto. Es una organización formada por la unión de varias agencias y personas de Bangalore, vinculadas a ONGs españolas y que se han unido para conseguir y gestionar ayudas para las víctimas de la tragedia. Las unidades sanitarias y los kit de supervivencia que se envían a Nepal, se componen de elementos para el aseo, un pequeño botiquín y útiles para comer.
Asimismo, el Ayuntamiento ha aprobado una partida de Ayuda Humanitaria, con un presupuesto de 5.040 euros, con 2.520 euros destinados a la FUndación África para la lucha contra el ébola, y otros 2.520 euros a la Congregación del Sagrado Corazón, para la asistencia a los habitantes de Kinshafa, en la República Democrática del Congo.
